“El diseño exterior de un automóvil es responsable en un 50 % del rendimiento aerodinámico. Por ejemplo, el estilo de las ruedas, los bajos, el flujo interno… Todos estos elementos son fundamentales y sobre todo a tener en cuenta para, al final, tener el rendimiento más eficiente posible”, explica Nicolas Lebrault, ingeniero aerodinámico de la marca.
Así, se llevó a cabo una batería de pruebas en túnel de viento con el fin de comprobar todos los puntos que pudieran provocar un sobreconsumo de energía. Se ha prestado especial atención a la parte delantera del coche, redondeada para generar pocas turbulencias, o a la parte trasera, tensada para tener la menor estela posible.
Veredicto: el Nuevo PEUGEOT 408, una línea inesperada desde todos los ángulos Y la promesa de un balance energético positivo a todos los niveles.
